La infinidad de posibilidades de medición en el trabajo que permiten las nuevas tecnologías, han hecho que la gestión del talento crezca exponencialmente y con más estrategia.
Aquí 4 lecciones de la gestión del capital financiero para implementar la medición y gestión en el capital humano.
1. Implementar métricas para la medición de resultados
- El talento es un recurso escaso y difícil de encontrar, el desarrollarlo y retenerlo hace la diferencia; pero esto tiene un costo alto. Hay que aprender a medir los resultados.
- Graficar el arrastre organizacional: ¿qué porcentaje de la organización es más eficaz?, ¿dónde hay un mejor rendimiento? ¿qué porcentaje de su organización es un talento destacado? Estos son los intangibles a tomar en cuenta.
2. Invertir en capital humano al igual que en el capital financiero
- Sin duda la capacitación y formación es el camino más seguro para aumentar el capital humano.
- La retención se vuelve fundamental para hacer crecer el capital.
- Medir los costos de proyectos en horas, antes de asumir una nueva reunión o iniciativa. Hay que incluir estos costos de oportunidad de tiempos y talento.
3. Monitorear el uso de tiempo del talento
- Tener revisiones periódicas de cuánto cuesta la apatía organizacional y gestionar estrategias para reducirla.
- A través de estadísticas, verificar en qué se invierte el tiempo.
- Verificar cómo se autogestionan los talentos más productivos. Saber sus comportamientos y actitud en el trabajo es crítico.
4. Reconocer y premiar la buena gestión del tiempo y talento
- Recompensar las medidas que se transforman en valor para la organización y compensen el balance del talento y lo económico.
- RH comienza su buena gestión del talento desde la selección.