Es necesario evolucionar de lo rutinario a una función de estratégica centrada en el negocio.
1. Integración del talento con el negocio.
Al hacer a los empleados parte de la ejecución de la estrategia, ellos podrán anticiparse a las necesidades comerciales.
2. Movilidad interna.
El talento existente debe ser reconocido como un recurso estratégico: deben reconocerse sus capacidades y las nuevas contrataciones deben ser para apoyarlo.
3. Evaluación basada en valores, ética y potencial.
Esto da como resultado una cultura corporativa
más sólida, que se refuerza con cada nueva contratación.
más sólida, que se refuerza con cada nueva contratación.
4. Construir equipos personalizados.
No solo se debe atraer a los mejores talentos, sino fortalecer la marca a través del empleo y de promover la cultura de la organización para lograr un mejor desempeño.
5. Promover la capacitación y aprendizaje informal.
Los equipos maduros se regeneran continuamente: RH debe promover una combinación de educación tradicional, relaciones de mentores, y de oportunidades para establecer contactos.
6. Uso de Inteligencia Artificial.
El uso del análisis de datos y de las herramientas digitales ayuda a obtener mejores fuentes de información, a evaluar candidatos, y a evitar posibles errores de juicio causados por sesgos o por una lógica incorrecta.