Existen áreas donde la formación puede potencializarse a partir de la interacción presencial cara a cara.
1. No todo puede ser enseñado a través de una computadora
Por ejemplo, las habilidades interpersonales necesitan del contacto humano para ser aprendidas de manera efectiva.
2. Fomentan la comunicación
La formación presencial busca establecer buenas relaciones personales para desarrollar la habilidad de “leer” a las personas, compartir ideas, hacer preguntas, escuchar, negociar, generar confianza, influencia, etc.
3. Construir conexiones dentro de los equipos
La interacción cara a cara permite compartir experiencias y resolver los problemas en equipo. En suma, ayuda a construir una mejor conexión integral.
4. Integración
Reúne a empleados de distintas áreas o divisiones que no se conocen entre sí: esto permite saber lo que sucede en diferentes áreas y resolver problemas en conjunto.
5. Aprender sin alejarse de la empresa
El aprendizaje presencial contribuye que el tiempo se aproveche de manera óptima, fortalece el compromiso, y asegura que los colaboradores reciban la información correcta.
6. Evaluación más eficiente
Debido a la cercanía, los entrenadores tienen mejores parámetros para evaluar el desarrollo y la comprensión de los asistentes. Al mismo tiempo, los asistentes adquieren un conocimiento más especializado.
Fuente: TD