1.- Definir atributos únicos.
Conocer visión, misión, valores, cultura organizacional, comprender objetivos comerciales y el talento necesario para lograr los objetivos.
2.- Comprender la percepción organizacional.
En los empleados, candidatos y posibles colaboradores.
Identifique mejores talentos y porqué les gusta trabajar en la compañía.
Determinar atributos del empleado estrella que la organización desearía atraer.
3.- Posición organización en relación con la competencia.
Realizar encuestas a solicitantes, a través de búsquedas en Internet y redes sociales, en las empresas que realizan un seguimiento de reputación.
4.- Valor de marca empleadora que comunique con claridad los esfuerzos desarrollados.
Que refleje realmente, lo que es especial en la organización y su alineación con la marca de clientes.
5.- Estrategia de mercadeo con un enfoque doble para los empleados.
Tácticas de reclutamiento enfocadas a los candidatos adecuados, que sean dirigidas a los portales de carrera, sitios de reclutamiento, redes sociales y otras fuentes externas.
Comunicación consistente con proposición de valor en los empleados actuales para retenerlos.
Uso de testimonios de empleados para afirmar la marca.
6.- Alinear la marca del empleador con una general de la compañía.
Trabajar con marketing y comunicación para garantizar un enfoque de marca holístico.
7.- Asegurar que las personas y prácticas de gestión, respalden la marca empleadora organizacional.
Prácticas integrales de RH, utilizadas para apoyar a la marca empleadora.
8.- Uso de métricas que evalúan y rastrean el éxito de la marca empleadora.
Incluyen calidad de contratación, conocimiento de la marca, satisfacción y referencias de empleados u otras métricas.
Fuente: SHRM
