Diez nuevas reglas del gestor de talento del siglo XXI.

Businesswoman Addressing Meeting Around Boardroom Table

Porque el mundo conforme avanza requiere de nuevas reglas. No te quedes atrás como gestor de talento

  1. Cada persona es única diferente y pertenece a diversas generaciones.

Las fórmulas que se pretende que funcionen igual para todos han dejado de existir. En la medida que entendemos que las personas quieren cosas distintas en las organizaciones, RH debe ser capaz de segmentar las necesidades para ofrecer lo necesario para que cada uno de los integrantes intergeneracionales esté dispuesto a dar lo mejor de sí en el entorno de trabajo.

  1. Crear y desarrollar espacios colaborativos.

El puesto único de trabajo, ya no existe. RH debe facilitar la movilidad, el trabajo virtual y los espacios compartidos. Es necesaria la colaboración, para que ésta impacte en que los resultados mejoren.

  1. Ofrecer proyectos y planes de carrera ante la obsoletización de puestos de trabajo.

Predecir la evolución de los negocios a largo plazo dejó de tener sentido. Ahora es importante la creación de planes de carrera lineales, al igual que enfocarlos para desarrollar proyectos que aparecen y se desarrollan en las organizaciones. Combinar corto plazo a largo plazo, con las preferencias personales y con las necesidades del negocio.

  1. Buscar, encontrar y transmitir un para qué del trabajo.

En la medida en que estén alineados la “causa” con los valores personales, se generará mayor compromiso e implicación en las personas y facilitarán el llegar a los resultados.

  1. Instaurar la ética empresarial como parte de nuestra cultura laboral.

 El proceso de desarrollo de la persona es único, su objetivo es que tenga todas las condiciones para que libere todo su talento. La combinación de los talentos, para lograr mejores resultados. Bajo valores compartidos a través de la honestidad y coherencia bajo un entorno laboral que permita ser pleno.

  1. Gestionar con el pensamiento: No escalar, sí recompensar. 

Las estructuras jerárquicas han quedado atrás, y su razón es porque se han obsoletizado. Para las nuevas generaciones es más importante recompensar de acuerdo a un resultado, bajo objetivos claros y razonables, y en donde el jefe sea un medio de apoyo y no un obstáculo.

  1. Libre albedrío para llegar a los objetivos, previamente negociados.

Lo importante es tener objetivos claros y definidos. Marquemos el Qué. Para sorprendernos de los resultados, cada vez más superables.

  1. Comunicarse a través con canales sociales diferenciados.

 Es fundamental abrir todos los canales de redes sociales posibles para conseguir la mejor y la correcta comunicación por parte de todas las personas de la compañía. La gestión multicanal de la comunicación dependerá de la eficiencia para conseguir los resultados.

  1. La experiencia laboral es a través de equipos de trabajo.

Necesitamos crear equipos de trabajo heterogéneos que enriquezcan la experiencia de cada uno de los miembros del grupo. La diversidad es un gran valor en el que todos los miembros ganan.

  1. El objetivo siempre es mejorar.

El liderazgo debe dar la visión del porqué ir hacia adelante con el talento adecuadamente seleccionado. Es su responsabilidad llevar a los talentos a permanecer fuera de su zona de confort para su crecimiento. Crear “plazos” cortos, realistas y realizables. Marcando su intensidad, porque es cuando más foco se debe mostrar para conseguir resultados. La visión del desarrollo, el seguimiento y el feedback del proceso es imprescindible que esté a cargo de los nuevos líderes comprometidos con el éxito del no competir sino complementarse.