1. Sé honesto
Si descubren que has mentido, seguramente perderás la oportunidad de trabajo.
2. Escoge la persona correcta
La persona a quien le pidas que de referencia laboral tuya sea alguien que conozca bien tu trabajo, y que avale tu desempeño y ética.
3. Evita dar una mala imagen de tu actual empleador
Si aún no has asegurado tu siguiente empleo evita despertar sospechas: es mejor pedirle una referencia a un compañero de trabajo que prometa discreción.
4. Escoge a personas con quienes tengas una buena relación personal
Es mejor no utilizar a tus familiares para una referencia: prefiere a alguien que tenga cosas positivas que decir sobre ti. Si no es tu ex jefe, puede ser un compañero.
5. Contacta a tu referencia con anterioridad
Si la persona que has escogido no tiene información precisa sobre ti o no habla favorablemente de tus capacidades, esto puede afectar tus posibilidades.
6. Las compañías también pueden ser una buena referencia
Si tu ex jefe o tus ex compañeros ya no trabajan en la empresa, pueden ser un medio para avalar tu experiencia anterior en esa compañía.