1.- Obtener el permiso

• Si no se hace puede parecer invasivo, así como describir expectativas de comunicación desde el principio de la conversación.
• Preguntar por los métodos de comunicación preferidos, para recibir actualizaciones de texto y si participan comunidades de talentos ver si hay permiso para enviarles mensajes de texto.
• Sin permiso previo, el primer mensaje debe ser corto y agradable, ya que el objetivo es involucrarlos, para que acepten hablar más adelante.
• Hacerlo solo cuando es necesario e interrumpir los mensajes si no hay respuesta.

2.- Con mesura

• Utilizarlos sólo para notificaciones automáticas o para comunicarse sobre logística, tiempos de entrevistas y preguntas de seguimiento amistosos.
• La comunicación prolongada es mejor por correo electrónico, teléfono y en persona.
• Cuando es urgente y no se puede conectar con el candidato por teléfono o por correo electrónico.
• No excederse de envíos y hacerlo adecuadamente con un claro llamado de acción.

3.- Ser profesional

• No enviar mensajes fuera del horario, ni demasiado personales.
• Comunicar solo textos relacionados con el trabajo o el proceso de contratación.
• Las ofertas de trabajo y los avisos de rechazo hacerlos por teléfono o por correo electrónico.
• Gestionar la comunicación, si el candidato tiene su número personal es fundamental.
• Cuando un candidato envía un mensaje de texto durante fin de semana indicarle que se le responderá el lunes.

Fuente: SHRM